En el recuerdo colectivo encuentran lugar muchas marcas de galletitas que nos han alimentado desde la infancia. Criollitas, Express, Sonrisas, etc Pero las galletitas que aùn conservan un lugar destacado en el recuerdo, son las Titas y las Manòn.
Fueron aquellas que nos vieron crecer y nos siguieron en la escuela! La empresa Bagley comenzò a producir galletitas en forma masiva ya a finales del 800.
La fabricación de galletitas para consumo masivo arrancó en 1875 de la mano de Bagley, cuando por una resolución del ministerio de Economía, durante la presidencia de Nicolás Avellaneda, se eximió a la compañía del pago de impuestos aduaneros para que pudiera importar las maquinarias necesarias para elaborar ese alimento.
Hasta ese momento, las galletitas que se atesoraban en las alacenas de los argentinos llegaban del otro lado del Atlántico, más precisamente del Reino Unido.
– Lanzada en 1875, Lola, la primera galletita de esta compañía en salir a la venta, tuvo una gran aceptación por parte del público, incluso en los sanatorios las incluían en sus dietas para pacientes internados. No tenía agregados artificiales.